25/11/09

Fragmento de una historia de amor .








Y ahí estábamos en la entrada de tu departamento, pase de la puerta y entonces me congelé, pensaba en mil y un cosas, pero sobre todo pensaba en que si daba un paso mas penetraría por completo en tu universo, no estaba segura si era lo que quería, si lo hacia podía caer mas hasta que fuera por completo dependiente.



-estas bien?- me preguntaste



Yo solo acentúe con la cabeza, pero estaba segura que mis ojos reflejaban otra cosa, después de eso me quitaste el abrigo, te quitaste el tuyo y te quitaste los zapatos, ¡extraña costumbre! Aun no la puedo adoptar. Me diste un tour por el departamento y empezó mi dulce tormento, quería recorrer milímetro a milímetro de tu mundo, descubrir mas cosas de ti por medio de el, tus colores tus sabores, tus olores, tus gustos, y de repente empecé a descubrir que todo era tal y como yo lo imaginaba, como en ese espacio cada pequeña cosa hubiera sido puesta por mi como si hubiera elegido exactamente el lugar que le correspondía a cada cosa, el comedor que nunca usas con libros en otros idiomas por todos lados, los libreros sin un espacio mas, la sala desordenada y con la cobija y la almohada en el sillón, una gran pantalla, la cama sin hacer, los baños en perfecto orden, el closet lleno de ropa que no usas, cortinas grandes y gruesas para que no te despierte la luz de la mañana, una sola lampara en esa habitación, y tu oficina hecha un completo tiradero, y claro la pelota de ejercicios no podía faltar; y las dos cosas mas importantes, la chimenea y la hermosa vista de una ciudad, ahora mi ciudad, hermosa, llena de oportunidades y dando la bienvenida con una sonrisa a todo el mundo, es como si solo unos cuantos pudieran encontrarla, no es muy comercial. Y ahí estaba ella, elegante, radiante, sonriendome. Me abrazaste y me diste una pequeña mordida algo tierno.

Fuimos a ver la película que escogimos y tu me quitaste las botas me abrazaste, y así duramos por un buen rato en el sillón, el universo era PERFECTO, horas de perfección, de sentir que mi vida era estable, que no había preocupaciones, o por lo menos estaba muy muy lejos de ellas. No había tiempo, no había hambre, no había frío, todo era perfecto, solo había una sed de ti.

El abrazo se convirtió en caricias, las caricias en besos, me mirabas y me estremecía, había profundos silencios, no silencios incomodos, sino esos en el que las almas hablan el mismo idioma.

Caminito a la habitación nos besamos en cada parada, fue muy especial, y benditas las mujeres que pasaron antes de mi, si ellas te enseñaron todo eso, era como si te hubieras convertido en mujer, si una parte tuya era mujer y sabias exactamente que quería: amor, placer, seducción, energía, descontrol y control, desenfreno. Quizá es porque nos entendemos tan bien y nos parecemos tanto que disfrutamos de las mismas perversiones, sin reparos, sin pena, en plenitud, me tomaste de la manera que quisiste, me cargaste, me empujaste, me seducías y me azotabas, wow, leíste mi cuerpo y todos mis manuales, sabias exactamente que debías hacer, los años de experiencia te han llevado a eso, me hiciste el amor sin llegar al coito. Dios estaba presente en ese momento y nos bendecía. El estaba en presencia de su creación y se regocijaba con la hermosura.
Como era de esperarse las horas se volvieron minutos y el tiempo ocupo su papel, nos trajo a la realidad y teníamos que separarnos por esa noche. Ni tu ni yo queríamos hacerlo. Desde entonces nuestras almas han danzado juntas, no pueden alejarse una de la otra, y esperan con ansia el momento en que los cuerpos se reencuentren para bailar juntos las danzas del amor.

2 comentarios:

MeRCuRyTa dijo...

Wow!

esta historia, converge con algo de la mia ;)

saludos amoraaa!! se feliz :)

nicko00 dijo...

Iuu la lula esta enamorada....


No veo mis creditos eh Lulis ¬_¬ horas detallandola, bah! Casi casi yo estaba abajo de la cama...

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